Hay temporadas, acabo de salir de una...o no he salido todavía...?. No
lo sé, tengo que reflexionarlo y vivirlo, o dormirlo, un poco más. Pués
hay periodos que no se duerme igual, más aún, se duerme ...raro. Te
quedas frito a hora pronta en el sofá, te despiertas un rato más tarde,
te metes en el sobre , echas un par o tres de horas, te despiertas,
pones a la "amiga", la mía es la radio y, bueno, pués hasta que te
volvía el sueño...Ah, claro, entre tanto..ya sabeis , la dichosa
próstata. Pero después de varias noches con ese trasiego, pienso, ¿y por
qué no aprovecho el tiempo?, así que no corto ni perezoso, me levanto ,
me pongo ante el ordenador y, ¡venga, hagamos cosas..!. Leer y escribir
fundamentalmente. Al cabo de un tiempo...vuelve morfeo a tocarme el
hombro , la mente y los ojos y, directo, a la piltra..y así varias
noches.
Claro, uno no quiere pensar en lo que cayó en sus manos,
hace bastante tiempo, sobre la forma de dormir de los medievales. ¿Ya lo
sabeis..no?. Pues que en la Edad Media, la gente dormía por estapas,
fundamentalmente, dos de aproximadamente 4 horas cada una con un
intérvalo que oscilaba entre la una y dos horas, por lo menos eso cuenta
un profesor que ha estudiado todo esto del dormir en esa época, Roger
Ekirch. Así lo asevera sin más, apuntando mucha faena a realizar en esa
media parte del sueño, desde practicar sexo, labores de la casa, enredos
varios incluso, comer, parece ser que dá hambre . Claro, yo me siento
identificado con eso de los "enredos varios". Este tal Ekirch, apunta
bondades, como recuerdo fresco de lo soñado, falta de ansiedad al
despertar , incluso llega a afirmar, en contra de las investigaciones
actuales que, es más sano que dormir esas 8 horas seguidas de las que
todos somos partidarios, aunque muchos y, a ciertas edades , no lo
consigamos. Pués a mí, lo de los dos tiempos, como en el fútbol, no me
sienta mal...no me encuentro , ni más cansado, ni más ofuscado que de
costumbre..que ya es mucho. Fluye lo que quiero expresar y asimilo lo
que quiero incorporar a mi mente, lo del hambre no se lo adjudico a la
forma de dormir, eso es marca de la casa.
Pués en ello estaba cuando
seguí con mi reflexión, echando mano de lo que había leido por ahí y,
algo no me cuadraba, a no ser que, evidentemente, la Edad Media fué muy
larga y hubo tiempo "pa tó". Me explico. A poco que se lean costumbre
medievales relacionadas con la forma de vida, te surge la cama y su
concepto. ¿Camas donde podían dormir un montón de personas...? Señores
con siervos y criados, Damas con sus doncellas, invitados de las
familias, era un honor....Camas inmensas que hasta los nobles hacían
varear lo que consideraban colchones para que nada ni nadie estuviera
escondido en el jergón.........
En fín que sí, que yo he
hecho eso de dormir por etapas, que no me sienta nada mal, que no sé sí ,
verdaderamente dormian en esa época así..pero que de serlo, divertido,
era. La cama, es , generalmente, principio y final de vida...y en el
medioevo, rellenaron y vaya si lo hicieron, el intermedio. Sería,
después de los pajares, el máximo elemento de socialización. Esto
último, va de coña...o no?
Vosotros os podeis imaginar que, por
ejemplo, ocho durmiendo en la misma cama y se despertasen a las cuatro
horas y empezara "la fiesta" del descanso del sueño...? Pués , si eso
fué cierto, los botellones y saraos de ahora.....de niños, oiga. Más
aún, por higiene la gente empezó durmiendo , desnudos y envueltos,
individualmente en lienzos, no habían ni mantas, sábanas o cubres, eso
fué después..Y ahora me quito el lienzo, me visto, me entra la modorra,
me vuelvo a desnudar y me envuelvo en la tela de nuevo.....Eso no es una
noche medieval, es una noche toledana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario